Justo
en el momento en el que empezamos a soñar con algo, nuestros sueños comienzan a
hacerse realidad. Todo seria perfecto si nosotros no nos encargáramos de
ponernos un despertador que nos devuelve a la realidad. Con esto quiero decir;
que si crees en algo no te lances al vacío en busca de los sueños que se hacen
realidad; pero, puedes empezar a fabricar una cuerda que te ayude a bajar. Y
para que no te decepciones, te recuerdo que en el vacío, no hay nada. ¿Donde están
los sueños que se hacen realidad entonces? En el camino, en cada escalón. Los
sueños provocan la misma sensación de felicidad que los recuerdos inolvidables.
Cierra los ojos, acuérdate de la primera vez que comenzaste a nadar tu solo,
sin flotador, sin manguitos, sin nadie que te agarrara de la espalda, o ese momento
en el que recibiste ese regalo que llevabas meses esperando, ese cd de música favorito,
ese videojuego, esa bicicleta, ese muñeco o muñeca, seguro que si recuerdas uno
de esos momentos felices, sentirás la misma sensación de los sueños que se
hacen realidad.
Uno de
los sueños que se hacen realidad en algún momento de tu vida, es cuando esa
persona, te da un beso. ¿Sabes lo que es que te den un beso en la mejilla? A
medida que nos vamos haciendo mayores pedimos besos en los labios, pero ningún beso
ha sido igual que aquel beso en la mejilla de mi primer amor. Yo todavía iba al
colegio, ella me gustaba por su manera de jugar al futbol; era la mejor. Me tenía
loco. Bien, pues un día jugando al escondite en un cumpleaños. Yo me escondí
bien escondido. Me tire un par de horas metido debajo del coche. Yo sentía que
no me buscaba nadie; asique empecé a aburrirme y salí de debajo del coche e
intentar salvarme a la carrera. Llegue a la señal y grite: “Por mi y por todos
mis compañeros y por mi el primero” Pero todos estaban dentro de la casa
comiendo la tarta de cumpleaños. No había tarta ya. Creíamos que te habías ido
Fran, dijo ella. Llegaba la hora de marcharse, ella se marcho con sus padres, y
yo le acerque al coche su abrigo (que casualidad era el mismo coche de mi escondite). Su madre dijo ¿que se dice? Gracias Fran. Se bajo del coche y me besó. ¿Qué?
ME BESÓ. Joder, me besó. ¡Guau! No me lo esperaba en absoluto. Fue un sueño
hecho realidad. La prueba es que más de una década después sigo recordando
aquel beso en la mejilla, y sonrío igual que aquel niño, que se paso toda esa
noche dando saltos en la cama. Lo peor; es que ahora cuando la saludo y le doy
dos besos ya no es lo mismo, ¿Por qué? Maldita madurez.
¿Habéis
jugado a Los Sims? Es como la evolución de un tamagochi, solo que en vez de
perritos, son minipersonas. Pacho vino a verme un día que yo estaba enganchado
al videojuego. Fue el día en el que descubrí que “KLAPAUCIUS” era el truco que
te daba dinero infinito. Me pase toda la tarde haciendo dinero, y preparando
una mansión enorme, con todos los lujos que estaba deseando tener. Pacho que ya
conocía el juego me dijo: Acabas de estropear el juego, dentro de una semana ya
no volverás a jugar. Y así fue, no volví a jugar mas, me empezó a aburrir. ¿Por
qué? Los juegos son divertidos porque tienes la posibilidad de morir, de que de
repente ponga en la pantalla; GAME OVER. Si le quitas eso le has quitado la diversión.
Los sims eran divertidos, porque tenían los mismos problemas que tu, tenían hambre,
se enamoraban, se dormían, se meaban, etc… ¿Te imaginas que tu lo tuvieras todo?
¿Qué tuvieras la contraseña KLAPAUCIUS en tu vida? Seria genial ¿no? Serias el
hombre más feliz del mundo ¿verdad? Pues acuérdate que eso mismo pensabas antes
de descubrir esa contraseña en el videojuego. Que Los Sims serian mas
divertidos si no hubiera limite de dinero. Y recuerda ahora que ya has dejado
de jugar, porque te aburrías. ¿Qué pasaría entonces si lo tuvieras todo?
Los
sueños se cumplen tal y como nunca los habíamos pensado, pero se cumplen. Solo
hay que dejarlos pasar. Y pasaran sin darte cuenta, y entonces, empezaras a
recordar. Cree en tus sueños, porque ya
has cumplido muchos todos los días; te lo aseguro.
FZG